lunes, 6 de julio de 2009

Mal de muchos ¿consuelo de tontos?

El fútbol es pasión de multitudes, pero también lo es la xenofobia. Cuando las tribunas se llenan los cánticos empiezan a sonar, gentilicios como “peruano” y “boliviano” son utilizados como ofensas. Pero el hecho paradójico es que tanto la propuesta como la respuesta son racistas. Si uno de estos términos es tomado como un insulto también se está discriminando.

El llamado folclore del fútbol ampara las actitudes racistas de las hinchadas y las convierte en diversión, en una forma de interactuar con el rival y de provocar a los futbolistas para tener una reacción del futbolista y por ende un beneficio deportivo. Es una ecuación lógica que hace el hincha y que, por desgracias, tiene resultados acertados.

Esto se debe al poco control que hay en las tribunas y en el mismo terreno de juego. Es inaudito que el espectador se sienta una parte interactiva del juego. Lo puede ser desde el aliento pero jamás desde la provocación.

Un punto a resaltar es que así como los deportes (pero el fútbol en particular) son tan masivos que abrazan razas, clases sociales y tribus urbanas en una sola tribuna. Allí a las diferencias se vuelven homogéneas y se centran en contra de un objetivo en común, la tribuna contraria.

Aquí la situación se pone graciosa. Cualquiera que haya ido a una cancha sabe que los cánticos discriminatorios son repetidos al unísono sin importar las características personales. Así un hincha de tez oscura es capaz de gritarle “negro de mierda” a otra persona y un boliviano puede cargar a un compatriota por su origen. El sentido y la racionalidad argentina se diluyen por completo en el evento.

Con los jugadores pasa algo similar. Son comunes los actos xenófobos y racistas en los partidos de fútbol. Sólo unos pocos terminan conociéndose en escándalos mediáticos, pero al tiempo todo es olvidado hasta que ocurre un nuevo hecho.

No sería justo adjudicarle al fútbol argentino estas reacciones, ya que como dijimos son a lo sumo expresiones carentes de sentido e inocentes. Igualmente deberíamos buscar los errores en el día a día y actuar desde allí para ir acicalando nuestros errores.

El caso del fútbol europeo es diferente, ya que tiene una gran participación de espectadores de extrema derecha que no pierden oportunidad para agredir al extranjero. Es un mal que sufre la actualidad del viejo continente y a veces, estas actitudes son demostradas por jugadores, evidenciando que en Argentina podríamos estar mucho peor.

Radio y Telexenofobia


Además de la panoria ocasionada en las organizaciones antiinmigración, el virus A H1N1 generó algo que va mucho más allá del simple recuento de afectados y de víctimas mortales: la legitimación de la xenofobia por parte de los medios de comunicación estadounidenses, que culparon desde el inicio a los mexicanos de ser responsables de la llegada y posterior permanencia del virus en territorio yankee.

Importantes personalidades de la radio y la televisión, y autores de blogs conservadores apuntaron su dedo acusador hacia los inmigrantes del país limítrofe. "Los extranjeros ilegales son los portadores de la gripe de México", señaló el polémico conductor de radio Michael Savage en su programa racista The Savage Nation. Mientras que Michelle Malkin, columnista de Fox News Channel y autora de la plataforma michellemalkim.com, sostuvo que "las enfermedades contagiosas" se desplazan fácilmente en los Estados Unidos debido a la "migración mexicana sin control".

Otro periodista de la cadena televisiva, Glen Beck, fue suspendido debido a sus ataques a los mexicanos, a quiénes llamó "criminales" y "primitivos". Algunos medios, incluso, bautizaron a la influenza como la "gripe fajita" o la "gripe mexicana". Pero ninguna de estas adjetivaciones pueden estar a la altura de las palabras de Jay Severin, conductor de Radio Boston (96.9 FMWTTK), que sólo fue separado provisoriamente de sus funciones en el micrófono:



Por su parte, la directora ejecutiva de la Coalición Pro Derechos Humanos de Inmigrantes con sede en la ciudad de Los Ángeles (CHIRLA, por sus siglas en inglés), Angélica Salas, calificó de "sinverguenzas" a estos "comunicadores nada sociales", y pidió que las comunidades migrantes dejaran de lado estos comentarios xenófobos para pedir información a las autoridades de la salud y evitar así el avance de la pandemia.

Evo contra los nazis

Bertolt Bretch dijo una vez: “Señores, no estén tan contentos con la derrota de Hitler. Porque aunque el mundo se haya puesto de pie y haya detenido al Bastardo, la Puta que lo parió está caliente de nuevo”.


La actualidad social y política boliviana está cruzada por un mal
eterno. La nación estuvo
gobernada durante muchos años por sectores neoliberales que favorecieron durante mucho tiempo a los más ricos.

Pero cuando Evo Morales se convirtió en el primer estadista indígena las cosas cambiaron. El origen aymará del nuevo presidente significaría una profunda reforma social y más igualdad entre los aborígenes y el resto de la población.

La decisión del nuevo gobierno de
modificar la Constitución para hacerla más equitativa y de reestatizar recursos naturales despertó la ira de las clases medias y altas.



Ya nada sería como antes para ellos. La reaparición de las capas marginadas que representan el 61 por ciento de la población impulsaron un intento secesionista de algunos departamentos.

Entonces allí apareció la Unión Juvenil Cruceñista, una organización nazi que confunde nacionalsocialismo con racismo, así como piensan que militancia y militarismo es lo mismo y que a Hitler le caería bien saber que un grupo de personas como el de ellos lo representan. Así de confusa es su participación.

Los ataques a otras comunidades se volvieron imparables, con varios muertos en pocas semanas y todos los medios latinoamericanos apuntando a la confrontación entre ricos y pobres.

Santa Cruz de las Sierra, Tarija, Sucre y Pando fueron los lugares donde los indígenas sufrieron los peores ataques. Las emboscadas y humillaciones se convirtieron en el plato fuerte de las tardes bolivianas y le dieron una paliza más a la realidad de las comunidades segregadas.


Con la bandera de la violencia, y ayudados por una clase reaccionaria, se sumaron una guerra a la que nadie los llamó. Además de agredir, éstos boys scouts hitlerianos
están acusados de participar en un intento de asesinato a Morales que que fue frustrado por la policía.

Pero el presidente boliviano no sólo debe luchar contra los vejámenes de éste grupo de fascistas. También se debe tener en cuenta la intervención poco feliz de Estados Unidos, que desde la asunción de Evo en el 2005 que lo relaciona con el narcotráfico, le envía especialistas en ceseciones y financia los intentos separatistas de las clases altas para altera el poco equilibrio que queda en la sociedad.


El racismo y la xenofobia pueden ser dos reacciones primarias que despiertan la violencia, pero todo tiene una causa. Por eso ahora Bretch se pregunta “¿De qué sirve decir la verdad sobre el fascismo que se condena si no se dice nada contra el capitalismo que lo origina?”

Estados unidos, pero por la xenofobia


La historia se repite, y muy probablemente continúe de la misma manera. El hecho de que la organización Americans for Immigration Control (Americanos por el Control Migratorio) le haya pedido al Congreso estadounidense el cierre de las fronteras con México para impedir el flujo de portadores de la gripe porcina, hace que valga la pena rememorar algunas prácticas xenófobas del pasado.

La primera víctima de los gringos

Entre 1850 y 1880, alrededor de 300 mil chinos llegaron a California para trabajar en las minas de oro y las vías férreas, con la esperanza de acumular una fortuna. Como de costumbre, pocos se hicieron ricos y el resto luchó por sobrevivir. Hacia 1870, la sociedad estadounidense comenzó a vivir el antecedente inmediato de la llamada "Gran Depresión" (el primer crack general del capitalismo), el desempleo alcanzó al 23 por ciento de la población activa y muchos culparon a los orientales porque los veían como una competencia laboral "desleal" (aceptaban ser contratados por menos para trabajar más). Se inició así un período de violenta discriminación en contra de esta etnia que alcanzó su punto máximo en 1882, cuando el gobierno de Grover Cleveland sancionó la Chinese Exclution Act.

Americanismo para los italianos

En la primera década del siglo XX, llegaron al país norteamericano dos millones de inmigrantes provenientes de la península itálica. A pesar de haber servido al ejército de los EE.UU. en la Primera Guerra Mundial (representaban el 12 por ciento de la U.S. Army), los italianos fueron víctimas del anticatolicismo y de las políticas de asimilación para convertirlos en "cien por ciento americanos". En 1917, el presidente Woodrow Wilson prohibió el ingreso de los analfabetos y una nueva ley en 1924 le restringió el ingreso de los italianos a 4 mil por año.

El antisemitismo nunca puede faltar

En 1847, ya había en EE.UU. unos cuatro millones de judíos que habían escapado de la Alemania nazi. Sin embargo, la pobreza y la discriminación también los afectó en tierras yankees. Eran vistos como otra amenaza en el mercado laboral, especialmente en época de crisis económica, y se los acusaba y perseguía por "comunistas". Con las normas discriminatorias de los años '20, el número de judíos se redujo de 120 a 24 mil en tan sólo tres años.

La inmigración por conveniencia

Entre 1900 y 1920 ingresaron a los Estados Unidos cerca de 14 millones de extranjeros, en su mayoría europeos. ¿Fue eso una muestra de que su sociedad estaba dispuesta a recibir a la inmigración? ¿Acaso los 4.4 millones de mexicanos que cruzaron ilegalmente la frontera en 1997 dan testimonio de la apertura que mostró este país hacia personas de otra raza y cultura? Lo cierto es que, como explica el periodista de política internacional Pedro Brieger, después de una oleada de mano de obra barata en época de auge económico, lo que sigue es un tándem de políticas antiinmigratorias y actos xenófobos que revelan la verdadera estrategia demográfica de Estados Unidos y el Viejo Continente.


La xenofobia que padecen hoy los inmigrantes mexicanos es muy similar a lo que ocurrió en la década de 1880 con los chinos o, en 1920, con los italianos. Claro está que esas dos décadas fueron el antecedente inmediato de un decaimiento económico que exacerbó las actitudes y comportamientos discriminatorios. Hoy, con esta nueva versión de esa crisis, no es de extrañar que la fobia social se traduzca en más redadas y leyes locales contra los que buscan aprovechar las posibilidades que no existen en sus países de origen. Y los chivos expiatorios coyunturales, como la gripe porcina, parecen ser la excusa perfecta.

domingo, 5 de julio de 2009

El rol de los medios


La actual Ley de Radiodifusión permite que los medios de comunicación argentinos se concentren en pocos propietarios que persiguen objetivos netamente económicos. La poca diversidad hace que las temáticas tratadas por radios, diarios y televisión puedan concentrarse
en hechos netamente superficiales.

Por ésta razón es que la inseguridad y el amarillismo convierten al usuario en un nihilista consumidor de lugares comunes. El primer efecto en las personas es salir en busca de un chivo expiatorio de todos sus problemas. ¡Y vaya si lo encuentran! Aquí es cuando el círculo vicioso vuelve a empezar.

Es en éste momento donde entran en juego el racismo y la xenofobia. Un ejemplo claro ocurre en la mayoría de las coberturas de los delitos donde participan extranjeros. Los periodistas siempre destacan la nacionalidad del victimario (nunca de la víctima) como información primordial.

¿Los medios dan lo que las personas piden o las personas reciben lo que le dan los medios? La pregunta es vaga, elemental y hasta eterna, pero es necesario que cada uno se lo plantee antes de elaborar una conclusión.

Otro ejemplo es cuando se refieren a la Villa 11-14 del Bajo Flores, en Buenos Aires. No dicen que es un símbolo de marginación, sino que es "un barrio sitiado por peruanos" . A la hora de hablar del narcotráfico debe quedar bien en claro si también son de Perú o son de Colombia.

En algunas ocasiones estas mañas son tan extremas que se convierten en parodias de sí mismas y resultan graciosas.


Así como los inmigrantes son noticias en casos delictivos, también son ignorados cuando resultan víctimas. La explotación laboral a la que son sometidos se refleja sólo en las tragedias.

Estos prejuicios están diseminados por toda la sociedad. La selección de noticias, los títulos y las adjetivaciones usadas por los periodistas dejan en claro que los medios están en manos de aquellos que sólo ven una parte de la realidad.

¿Pero es una bajada de línea de las autoridades de la empresa o son los mismos periodistas los que tienen una formación limitada y segmentaria?

Tras el último conflicto con el sector agropecuario, el Gobierno ordenó abrir un Observatorio de Medios para analizar la cobertura racista y mal intencionada de los canales de televisión y diarios.


La discriminación agresiva y la xenofobia se reproducen en los jóvenes con gran rapidez, y deja en evidencia que las vías de información están contaminadas por voces irracionales. Es por este motivo que una nueva Ley sería la mejor forma para que esos discursos pasen a un segundo plano.

miércoles, 1 de julio de 2009

El mundo al alcance de un clic


¿A quién se le ocurriría enfrentarse a un monstruo multinacional que maneja casi la mitad de las herramientas de Internet? La respuesta es a nadie. Google es uno de esos monstruos, uno mitológico, que se impone en tamaño y fuerza al resto de los pequeños bichos de efímera existencia que componen el mercado actual.

Pero a no preocuparse, porque es una bestia mansa que tiene como único fin ayudar a la gente. "Don´t be evil" (no seas malvado), es el slogan de la empresa y sirve para tranquilizar los ánimos de todos los que dudan de la ética empresarial.

Para mostrar la docilidad de sus jefes, Daniel Helft, Senior Manager, Product Communications, Latin America de Google, dio una conferencia para los amigos de TEA y contó entre penumbras el gran objetivo de la compañía.



El buscador más famoso nació como un humilde proyecto de dos estudiantes de la Universidad de Stanford, en Estados Unidos, para crear un completo buscador de Internet. Hoy es el más importante del mundo y lidera el ranking de visitas diarias. Y a pesar de que algunos intentan desbancarlo con nuevos proyectos, la empresa para la que trabaja el verborrágico orador de cargo difícil logró armar un gran conglomerado informático, hecho que lo hará resistir más la competencia.

Hace poco se alió con Yahoo. Al tiempo adquirió parte de YouTube y forjó un imperio. "No seas malo", siguió siendo su slogan. Sin embargo cuando el gobierno estadounidense le pidió ayuda para luchar contra la pornografía infantil, dijo que no.

A través del tiempo se siguió expandiendo. Obtuvo la página Web de imágenes Panoramio y la fusionó con Google Earth. Llegado el 2008 compró Twitter y Facebook, dos de las redes sociales más importantes.Mientras tanto gana miles de millones al año en publicidades muy particulares.


La tecnología avanza y las nuevas herramientas son cada vez más sorpendentes, complejas y tentadoras:


Google tiene a su alcance información personal y perfiles de millones de personas, y eso le da capacidad para hacer cosas que a los usuarios no nos gustarían. Por este motivo somos nosotros los que le rogamos "no seas malvado".